Leí hace poco en el
blog de Gustavo Faverón la carta abierta que Fernando Ampuero envió al diario El Comercio. Carta que, lamentablemente, hasta el momento en el que cuelgo este post no ha sido publicada por dicho diario. En ella, Ampuero protesta por los ataques constantes que vienen recibiendo los ex periodistas de esa empresa.
Pablo O´Brien, Augusto Álvarez Rodrich, Fernando Rospigliosi, Rosa María Palacios, junto al propio Fernando Ampuero no solo están siendo permanentemente hostigados por articulos publicados en las páginas de ese periódico, sino que, más grave todavía, están siendo peligrosamente expuestos en la plaza. Las cosas no están bien, claro que no. Si la Fiscal de la Nación recibe una andanada de balazos en medio de un contexto ensombrecido por petroaudios, chuponeadores y denuncias y más denuncias de corrupción, qué se puede esperar para aquellos que participaron en la investigación de estos hechos o que pusieron en vitrina precisamente dichos escándalos. Mi solidaridad plena con todo ellos y la pálida esperanza de que haya pronto las rectificaciones del caso.
No obstante, Fernando Ampuero – seguro ya algo acostumbrado a vivir caminando por la orilla – no se ha detenido para nada en su labor literaria. Editorial Planeta ha reeditado su libro de cuentos
Bicho raro. Publicación que Alonso Cueto presentó el fin de semana pasado en la
Feria del Libro de Trujillo. Se trata de una edición definitiva, en donde se ha hecho una meticulosa revisión y correción de sus cuentos. Por lo que entiendo, con esta edición queda el camino listo para una edición de sus cuentos completos, más inclusión de varios trabajos inéditos. Edición que podría salir este año, en el que precisamante el autor cumple los sesenta años.
*