A propósito del último ganador del PREMIO PLANETA 2008, reproducimos sus declaraciones en la primera conferencia de prensa que brindó después de ser galardonado.
Fernando Savater (San Sebastián, 1947) ganó en la noche del miércoles el Premio Planeta en su 57 edición gracias a ‘La hermandad de la buena suerte’, una obra que presentó como ‘La curva del Pardo’ y bajo el seudónimo de Patricio. El próximo 6 de noviembre comenzará la gira de promoción del libro, del que la editorial Planeta editará 210.000 ejemplares. Esta entrevista está realizada con las respuestas que el escritor vasco ofreció en las ruedas de prensa de la madrugada del miércoles y ayer por la mañana.
-¿Qué es ‘La hermandad de la buena suerte’?
-Es una novela de ficción, sin pretensiones realistas o históricas. Transcurre en el mundo del turf: se aproxima la carrera de caballos más importante del año; hay dos magnates que se odian y quieren dirimir sus diferencias humillando al adversario por medio de la carrera. Uno de ellos tiene un gran caballo, pero muy especial y difícil de montar. Y el único jinete que podría montarlo ha desaparecido. Hay cuatro personajes aventureros que tienen el encargo de encontrarle antes de la carrera. La novela está contada con varias voces y cada capítulo tiene entidad propia, su propio narrador. Es una novela de aventuras con un poquito de metafísica: qué es la buena suerte, hasta qué punto se puede perseguir…
-¿Qué dificultad tiene escribir una novela para alguien que habitualmente no produce ficción?
-Como autor de artículos, me gusta comprimir y resumir. En cambio, el 90% de una novela es puro relleno; todo se dilata y tarda en llegar. Como lector me gusta, pero como escritor me aburre. Es un reto que ese relleno no se convierta en frases vacías. Esta es una novela desgrasada, ‘low fat’, que no engorda.
-Con tanto ‘desgrase’, ¿en cuántas páginas ha quedado la novela?
-Me horrorizan las novelas largas. Una novela de 800 páginas en España sólo se la tolero a Javier Marías y pocos más. Pero en fin, la mía tampoco es un cuento; desgrasar no es lo mismo que deshojar… La grasa se quita de dentro.
-En el libro aparece una de sus pasiones, el mundo de la hípica. ¿Están también sus otras obsesiones: la política, la filosofía, el nacionalismo…?
-Quiero tranquilizar al lector. Mis lectores habituales están resignados a aguantar mis sermones sobre política, filosofía… En este libro me he tomado unas vacaciones de mí mismo. Aquí no hay teorías. Marcel Proust decía que una novela con teorías es como un regalo con el precio puesto; las teorías en una novela deben ir por dentro, sin que se note. He escrito sobre lo que me gusta y me divierte. Como Borges, soy un lector hedónico y también un escritor hedónico.
-¿Se nota cuando un escritor se divierte?
-Bueno, yo soy hedónico en el terreno literario, porque es lo que escribo sin necesidad. Mis artículos, mis libros de ensayo, son parte de mi vocación pedagógica, educativa, que es a la que he dedicado mi vida, y eso lo escribo con un sentido de la responsabilidad. En la literatura soy yo el dueño y el pacto con el lector es: ‘Yo me voy a divertir y procuraré divertirte a ti’. Nada más. Eso es lo que he hecho. A veces hablan de la vida desgraciada de Edgar Allan Poe, pero yo creo que se lo pasó estupendamente escribiendo ‘La verdad sobre el caso del señor Valdemar’ o ‘La narración de Arthur Gordon Pym’. En la vida hay muchas desgracias, pero poder escribir un relato o una aventura, algo que a uno le guste, es un privilegio y una suerte.
-Primero ganó el Planeta Álvaro Pombo, candidato de UPD; ahora, usted, promotor del mismo partido. ¿Cree que la diputada Rosa Díez debería presentarse al premio?
-¿También lo ha ganado Mario Vargas Llosa! Habría que preguntarle a Rosa si piensa escribir una novela…
-Una de las obras finalistas trataba sobre un terrorista de ETA que se siente traicionado y empieza a combatir a sus antiguos compinches. Algunos hemos pensado que el autor era usted… -Cuando a uno le etiquetan es muy difícil salirse de ahí. En el servicio militar me nombraron sastre, y tuve que ser sastre, con gran perjuicio para la vestimenta militar… Bastante tiempo pierdo con el terrorismo en otras actividades como para encima tratarlo también cuando me divierto. Uno ha hecho otras cosas en la vida…
-Han ganado el Planeta dos obras con una trama detectivesca. ¿Reivindica una novela más de estilo anglosajón, con más acción?
-Bueno, muy detectivesca no es. No es un thriller, es más bien una novela de aventuras. Hay acción al uso, pero también hay una acción interior. Por ejemplo, uno de los personajes va contando todo lo que le ocurre al fantasma de su mujer. Otro relata un sueño que ha tenido…
-Alguna vez ha dicho, citando a Picasso, que su ambición es ser rico para vivir como un pobre. ¿Los 600.100 euros del premio ayudan?
-El verdadero lujo de nuestra época es no pensar en el dinero. Hay dos tipos sociales que viven obsesionados por el dinero: los que tienen mucho, porque tienen que aumentarlo y asegurarlo y cuidarlo como un rebaño para que no se escape; y los que no tienen nada, porque lo necesitan para comer. A mí me gustaría tener esa cantidad de dinero que le permite a uno dejar de pensar absolutamente en el dinero. Yo soy un jubilado ya y necesito completar la pensión…
Fuente: http://www.ideal.es/granada/20081017/cultura/fernando-savater-premio-planeta-20081017.html