ANTES DE CERRAR EL AÑO
Antes de que se vaya este año, todo el agradecimiento a los amigos que llenaron mi vida con lo bueno y con lo malo. En verdad, gracias por todo. Para este año que viene, ya veremos si al presidente le alcanza el litio que ha almacenado o regresaremos a esos años difíciles que vivimos. Asì también, en el ámbito internacional, terminaremos de saber si las mentiras de un presidente norteamericano se convierten en verdad a fuerza de decirla tantas. Hay tantas cosas que han pasado, algunas, como si fueran la repetición de una vieja película (de error) de cada martes. Veremos también si a literatura peruana (bueno a todos en general) le sigue yendo tan bien. Después de todo ( o quizás por eso mismo) la dramática ubicación de colero en la tabla de comprensión de lectura en América no ha mellado la creatividad de muchos. Habrá que ver tantas cosas. Por lo pronto, comparto con ustedes, algunas promesas sencillas con las que interrumpo (con el debido permiso) la línea de este blogs. FELIZ AÑO 2007.
– Terminar un libro de cuentos que tengo prometido desde hace tanto tiempo y, así, dejar de hacerme el cuentazo de que escribo.
– Ser más constante con este blogs que me ha dado nuevos amigos. Empecé sin mayores ambiciones y, sin embargo, la cosa ha funcionado y siento que estoy más cerca de mis amigos. Después de todo, para ellos escribo.
– Leer mucho más y comentar de eso a muchos más. He aprendido que hace falta compartir lo que de bueno se pueda tener.
– Cerrar (con candado y doble seguro, más una cruz) toda una mala etapa. Cerrar todo para que el relente doloroso de la deslealtad y el mal amor no se cuele entre las fisuras de siguiente año.- Ser más frecuente con los amigas y amigas que – así es de aleccionador el tiempo – de haber compartido tanto en algún tiempo ya se ha consttruido una amistad irrebatible.- Escribir, sobre todo escribir.